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Argentina - Museo de Arte Religioso Juan de Tejeda

El edificio, como construcción, es resultado de la mano de obra negra e india. Asimismo, testimonia una de las dimensiones inmateriales del monasterio, en tanto también resalta el sentido de las comunidades religiosas como centros de producción que se valían de hombres y mujeres esclavizados para la realización de las diversas tareas.

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Casa habitada (el museo funciona en el primer patio del Monasterio San José de Monjas Carmelitas Descalzas, que sigue funcionando en el corazón de la manzana.

En la sala 7 del museo se observa la obra de carpintería encargada a José Francisco Javier del Santísimo Sacramento, pardo nacido en 1749, de padres esclavos propiedad del monasterio de las Teresas. Luis Roberto Altamira señala que Sacramento había sido instruido en los rudimentos del arte por el hermano Antonio Negle, quien también le habría enseñado a macerar colores.

Se conoce asimismo que Sacramento tuvo su taller a los 19 años y que en 1775 fue convocado para producir, desde sus conocimientos de pintura artística, un informe al rey sobre el estado de las obras en la Catedral, responsabilidad del obispo y del gobernador. Al parecer, Sacramento no era un pintor consumado sino que se limitaba a copiar viejos óleos producidos en otras regiones de América y estampas llegadas de Europa. De todos modos, se le atribuyen cinco pinturas que se guardan en el monasterio de calle Independencia: un cuadro del Divino Rostro, sendos retratos de las monjas Teresa de Jesús y Catalina de Cristo, y las efigies de las legas Teresa Luisa de San Ángelo y Ana de Jesús. Esta última no es otra que María Magdalena de Tejeda y Guzmán, hija de don Juan Tejeda. Entienden los especialistas que Sacramento copiaba las figuras monjiles y su entorno inmediato de pinturas que le llegaban del Alto Perú y aún del Cuzco, a las cuales en sus rostros confería algunos rasgos particulares. Tanto sus padres como el propio Sacramento, hasta su manumisión, habían sido esclavos de la religiosa María del Sacramento, de aquí el apellido del pintor, dama que para el siglo no era otra que doña María Magdalena de la Vega, viuda del general Pablo Guzmán, y suegra de don Juan de Tejeda, original dueño de la propiedad donde se asienta el museo. Se presume que Francisco Javier del Sacramento obtuvo su condición de pardo libre antes de 1786, según hipótesis del sacerdote jesuita Pedro Grenón. En el censo de 1813, cuando ya tenía 64 años, Sacramento aparece como de oficio pintor, con mujer e hijas costureras e hijos carnales y políticos sastres, además de un nieto músico. En ese año de 1813, Francisco pinta el escudo nacional argentino sobre la fachada del edificio del cabildo, a pedido de esta corporación y según las disposiciones de la histórica Asamblea, la misma que había decretado la libertad de vientres para todos los nacidos de madre esclava desde ese momento en adelante. La plena libertad para los negros esclavos sólo sería reconocida por la constitución de 1853, cuarenta años más tarde, y en toda la extensión del actual territorio argentino desde 1862, cuando Mitre adhirió con recaudos al contenido de la Carta Magna. Francisco Javier del Sacramento testa en el año 1809 y se especula que sus restos, como los de un hijo premuerto, fueron enterrados en el propio monasterio de las Carmelitas Descalzas, amortajado con el hábito de la Virgen del Carmen[1].

Sobre la galería Este del patio del museo se observan cruces de camposanto de hierro forjado, siglo XIX, del cementerio de Tegua, una localidad del sur provincial. Fueron donadas en 1986 por el pintor Egidio Cerrito. Pertenecían a su colección privada.

En la composición de las mismas se observa un diseño de influencia africana, un símbolo “adinkra” muy utilizado por las culturas del oeste de África conocido como “sankofa”. Los símbolos Adinkra representan conceptos abstractos y complejos. Cada símbolo posee un nombre, su propio significado y un proverbio. Estos significados suelen reflejar creencias religiosas, valores, pensamientos filosóficos y el pasado histórico.

Sankofa significa “regresa y tómalo”. Recuerda la importancia de recordar el pasado y aprender de él. Se representa mediante un ave casi circular. Insta a mirar al pasado para crear el futuro y no olvidar.

En la sala 8 del museo se exhibe un recipiente de terracota con asas de manufactura afro (según el arqueólogo Alfonso Uribe, es una bacinilla): recipiente de forma ligeramente troncocónica y boca ligeramente volcada hacia afuera. Tiene dos asas semicirculares hacia la mitad del cuerpo, sobre la cara exterior que es de superficie irregular pero lisa. Es de color marrón claro con manchas más oscuras y otras negras. Siglo XVII. Realizado en Córdoba. Uso doméstico. Pertenece al Monasterio San José de Carmelitas Descalzas.

Entre los pintores se destacó Francisco Javier del Sacramento, un afrocordobés nacido en 1749. Dos de sus obras se exhiben en el Museo de Arte Religioso Juan de Tejeda y son retratos de las legas “Teresa Luisa de San Angelo” y “Ana María de la Madre de Dios”. Es posible que tanto él como uno de sus hijos estén sepultados en la Iglesia Santa Teresa del Monasterio de Carmelitas Descalzas de San José ya que éste último lo solicitó expresamente en su testamento.

En la sala 7 del museo puede observarse un marco de madera que envuelve una ventana con puertas realizado por Francisco Javier del Sacramento. Esta “alacena pequeña” denominada “taca”, palabra de origen árabe hispánico (táq) que significa “ventana”, es un mueble de dos partes, amurado. La inferior es apaisada y tiene un marco de madera policromada imitando mármol. Tiene dos hojas, con cerradura de hierro, parcialmente dorada. En el exterior de dichas hojas, aparecen dos novicias con el Niño Jesús, delante de una ventana por la que se ve un árbol. Adentro de las puertas hay dos retratos de monjas carmelitas. El cuerpo superior tiene forma de pórtico clásico, flanqueado por dos molduras con volutas doradas. En el tímpano, de fondo oscuro, se lee "año de 1768". El conjunto enmarcaun nicho que tiene una peana de mampostería.

Además puede leerse, en la base del cuerpo superior "JPH FRANco XAVIER DEL S. SACRA". En el cuerpo inferior, en la cara externa "H. TERESA LUISA DE S. ANGELO" y "ANA MARÍA DE LA M. DE D.". En la cara interior a la izquierda y derecha respectivamente se lee "MNA. DE IESU" y a la derecha "B. CATHARINA DE XPO." y arriba en una cinta-cartela blanca, pintada "DOCUISTI ME DOMINE A INVENTUTE MEA".

Actualmente las puertas se encuentran fijas a la pared, por lo que sólo puede verse a la izquierda la copia hecha por Francisco Javier del Sacramento de un retrato del siglo XVII (original de Juan Bautista Daniel) que representa a la monja Ana María de la Madre de Dios, es decir Ana María Guzmán, la viuda de Juan de Tejeda. El retrato original habría llegado en muy mal estado a mediados del siglo XVIII por lo que le habrían encargado la copia al artista afrodescendiente. Es una pintura sobre madera.

A la derecha se observa el retrato de Sor Teresa de Jesús (María Magdalena Tejeda según L. R. Altamira), es un óleo sobre tela. Luis Roberto Altamira lo atribuye a Francisco Javier del Sacramento, mientras que Schenone lo atribuye al pintor danés Juan Bautista Daniel por la diferencia en la factura respecto a la pintura sobre tabla de Francisco del Sacramento.

 

[1]  IGHINA, Carlos A. De pintores pardos y morenos. En sección Opinión. Diario Comercio y Justicia.

Publicado el 22 de julio de 2015. Córdoba. Argentina. Disponible en

http://comercioyjusticia.info/blog/opinion/de-pintores- pardos-y- morenos/   

 

 

 

Todas las líneas de transporte público de la ciudad pasan en un radio de 3 cuadras.
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Otros datos de interés

Argentina

Nombre histórico

Monasterio San José de Carmelitas Descalzas

Fecha de fundación

El Monasterio se funda el 7 de mayo de 1628 y el Museo el 8 de diciembre de 1970

Dirección

Independencia No. 122, Centro, Córdoba, Povincia de Córdoba , PC: X5000IUD .

Teléfonos

+54 0351 4281540

Enlaces a Redes Sociales

http://facebook.com/juandetejeda

http://twitter.com/MuseoTejeda

http://www.museotejeda.com/#!/-visita-virtual/

 

 

 

 

Entidad responsable

Estado Municipal de Córdoba y Arzobispado de Córdoba

Dirección WEB

www.museotejeda.com

Clasificación

Edificación

Categoría

Otras Monumento local Monumento nacional

Función-testimonio

Lugar de enterramiento Lugar de producción Vivienda

Nivel de acceso

Público

Uso actual

Museo

Uso original

Monasterio de clausura

Tipo de propiedad

Privada

Expresiones del patrimonio inmaterial relacionadas

  • En la antigua portería interna del monasterio (sala 2 del museo) se vendían los productos que producía el monasterio además de recibir las donaciones de la gente y compras hechas por la comunidad religiosa. Las principales producciones del Monasterio eran los tejidos artesanales realizados por las monjas y la ollería de terracota fabricada por los esclavizados de la casa.
  • En el actual patio del museo (claustro más antiguo del monasterio) se producía originalmente la ollería de adobe que se vendía en la tienda del monasterio. Una vez que los esclavizados elaboraban las vasijas, las cocían en diversos hornos que había en este lugar[1].

[1] En relación a esta producción y otros hechos, podemos encuadrar la siguiente información: Diversos obispos visitaron el monasterio San José a lo largo de los siglos y elaboraron informes muy disímiles sobre su dinámica interna. Fue el informe del obispo José Antonio Gutiérrez de Zevallos en 1733 el que desató una guerra entre la comunidad de carmelitas y el prelado, y dividió a la sociedad en dos bandos. Gutiérrez de Zevallos había sido inquisidor en Cartagena de Indias y fue consagrado como el duodécimo obispo de la diócesis del Tucumán en 1730. Arribó a Córdoba tres años después dispuesto a poner orden y disciplina. Anoticiado por su predecesor, el obispo Juan de Sarricolea, sobre ciertas irregularidades que acontecían en la casa conventual, su primer encontronazo con las Carmelitas Descalzas fue en 1733, acusándolas de no respetar la clausura al tener un gran número de criadas seglares negras y mulatas que entraban y salían a su antojo; y comerciar dentro del monasterio ollas, tinajas y botijas que producían en unos hornos instalados en el patio. La confirmación de tales anomalías llegó de la mano del rector del Colegio Máximo, el jesuita Miguel López, confesor de las Carmelitas.

Acompañado de seis hombres, entre sacerdotes y oficiales públicos, el Obispo recorrió el monasterio el 4 de diciembre de 1733 y entrevistó a seis monjas bajo juramento de verdad so pena de excomunión. Pudo constatar que habían 40 esclavos, entre hombres y mujeres, y que 34 mujeres, entre grandes y chicas, compartían la clausura con las monjas, de las cuales 13 eran españolas y el resto, libres y esclavas. Inclusive las libres estaban casadas por lo que al atardecer volvían a dormir con sus maridos y las esclavas, solteras, salían de día y volvían a dormir al convento. Las únicas que nunca abandonaban el claustro eran las 13 blancas. El prelado también averiguó que algunas monjas hacían negocio particular con la fabricación de ollería. Poseían hornos donde criadas y esclavas elaboraban ollas, jarros y tinajas, en muchos casos de grandes dimensiones, por lo que era imposible pasarlas por el torno y eso generaba asidua apertura de la puerta reglar, además de la entrada constante de insumos, en este caso leña y barro.

El obispo analizó los testimonios y elaboró un documento con 23 artículos denominado “Ordenaciones y reglamentos” que buscaban detener los abusos cometidos. Allí determinaba que todas las personas ajenas al monasterio debían abandonarlo excepto las esclavas necesarias para asistir a las enfermas y continuar con el negocio de las ollas, que mandó se trasladase a la ranchería (vivienda de negros esclavos) y que pase a ser un beneficio comunitario y no particular de determinadas monjas, con lo cual generaría un ingreso para las endebles finanzas del monasterio. Por otro lado ordenó vender al resto de los esclavos (a mediados del siglo XVIII el Monasterio otorgó la libertad a un importante número de esclavos, con que contaba).

Declaratorias

  • Monumento Histórico Nacional 1941-11-28
  • Monumento local