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La alegría de celebrar el Premio Casa 2022

28 enero 2022/ La Ventana, Portal Informativo de Casa de las Américas

A la noticia, que celebramos el pasado 24 de enero, del anuncio de la realización del Premio Literario Casa de las Américas 2022, ahora se une la confirmación del término del trabajo del jurado, lo que indica que ya tenemos un nuevo grupo de autores que integra la lista de galardonados en este certamen, cuyo número ha venido creciendo a lo largo de más de seis décadas.

Esta ha sido la primera vez para muchos procesos relacionados con el Premio Casa, el más importante: la posibilidad de los autores de enviar sus obras en formato digital, lo que desató un alud de más de mil seiscientos libros y reafirmó la fraternal acogida que recibe siempre el Premio entre los escritores, fundamentalmente, de América Latina y el Caribe.

Otro estreno supuso la convocatoria de solo tres géneros (Poesía, Novela y Ensayo de tema histórico-social), lo que hizo aún más sorprendente la avalancha de obras recibidas, como no se había visto en la historia del evento.

Como parte del abrazo definitivo de las bondades tecnológicas, este año varios de los integrantes del jurado, entre ellos, Mayra Montero (Novela), Carlos Aguirre (Ensayo de tema histórico-social), Rosa Chávez (Poesía) y Claudia Apablaza (Novela), en algún momento del transcurso del certamen; debieron trabajar desde la distancia, vía virtual, con sus compañeros para finalmente decidir el ganador(a) en cada uno de los apartados, así como las posibles menciones.

Entonces, después de este pequeño recuento se hace impostergable poner en blanco y negro las decisiones del jurado:

En Poesía el premio del jurado recayó en el libro Excepcional belleza del verano de Luis Lorente, de Cuba.

Jorge Boccanera (Argentina), Basilia Papastamatíu (Argentina-Cuba), Rosa Chávez (Guatemala) y Santiago Vizcaíno (Ecuador), convinieron en el acta que:

“Como sobre la pantalla de una lámpara, el autor despliega sus visiones y recuerdos que se corporizan y se evaporan. De modo que la escena se potencia por la ramificación de una simbología profusa que alude a la estancia amorosa como también a numerosos momentos de vida, de personajes de la historia de Cuba, incluso de una cotidianidad revisitada. Es un registro minucioso recreado por una memoria singular, de lenguaje virtuoso, atmósferas logradas y excelente manejo del ritmo. Destaca también este libro por la fuerza y belleza de imágenes eslabonadas que serpentean como un solo y contundente poema”.

Además, decidieron otorgar menciones a los libros Bordando Quilkas de Carolina O. Fernández (Perú) y Por alguna vez cuando oscurece de Benjamín Chávez (Bolivia).

Los jurados reunidos para premiar la categoría de Novela, Dazra Novak (Cuba), Mayra Montero (Puerto Rico), Claudia Apablaza (Chile) y Santiago Vizzcaíno dieron su beneplácito a Hija de nadie, de Javier Núñez de Argentina.

Al valorar la obra destacaron: “Muestra un buen pulso narrativo, gran manejo de los diálogos y narra, en tono cinematográfico, la historia distópica de dos mujeres que resisten a una realidad áspera y cruel”.

En el apartado Ensayo de tema histórico-social recibió el premio Moneda y malestar social en Cuba (1790-1902), de José Antonio Piqueras Arenas (España).

Carlos Aguirre (Perú), Mario Santucho (Argentina) y Yoel Cordoví (Cuba), integrantes del jurado, al evaluar las obras en esta categoría resaltaron la de Piqueras Arenas por ser un “ensayo riguroso sobre el lugar de la moneda y las relaciones monetarias en la formación histórica de Cuba entre finales del siglo XVIII y el fin de la ocupación militar de los Estados Unidos. El trabajo ilumina la historia económica cubana en los convulsos escenarios que signan el esplendor y la crisis del modelo colonial. En el texto se profundiza, con rigor y a partir de un profuso material documental y bibliográfico, en la compleja relación entre capitalismo y esclavitud, la estructura de clases en la isla y las formas de descontento de diversos grupos contra la dominación extranjera. Asistimos, así, a un aporte sustancial a la historia de Cuba que, además, ofrece importantes lecciones para el presente”.

Todos los desafíos impuestos por la situación epidemiológica provocada por la Covid-19 pudieron ser superados, con mayor o menor pericia, por todos los trabajadores de la Casa de las Américas y los escritores convocados en esta ocasión para conformar el jurado. En cada una de las soluciones halladas siempre prevaleció el amor de todos por este evento, que existe prácticamente, desde que la Casa de las Américas es; y que como ya se ha afirmado “es parte esencial de la cultura latinoamericana y caribeña desde hace más de medio siglo”.

Nos alegra sobremanera poder decir: hemos celebrado el Premio Casa 2022. ¡Felicidades a todos los galardonados!